Calabaza madura por dentro
Las calabazas son una divertida calabaza de temporada con muchísimos usos. Hay calabazas para tartas, linternas y exposiciones. Puedes cultivar calabazas pequeñas o grandes. Si quieres empezar a cultivar calabazas en tu jardín pero no sabes qué esperar, ¡estás en el lugar adecuado! Aunque existen algunas diferencias entre las variedades de calabaza, esta guía general para el crecimiento de las plantas de calabaza es un buen punto de partida.
Cultivar calabazas a partir de semillas es fácil y divertido, pero hay algo que debes tener en cuenta primero. Las distintas variedades de calabaza crecen a velocidades diferentes. Cuando compres semillas, el paquete debería indicarte cuánto tardan en estar listas para la cosecha. Si no es así, puedes buscar la variedad específica que tienes. Si no estás seguro de qué tipo de calabaza tienes, la mayoría de las variedades tardan entre 90 y 110 días en madurar y dar fruto.
Las semillas de calabaza no tardan mucho en germinar y brotar. De hecho, ¡son bastante rápidas! Las semillas de calabaza suelen germinar en unos 10 días. No suele haber ningún problema con esta etapa. Ocurre tan rápido que, cuando se detecta algún problema, ya es demasiado tarde para solucionarlo. La buena noticia, sin embargo, es que sabrás bastante rápido si tus plantas no están creciendo. Si tus semillas no han brotado al cabo de 10 días, es hora de plantar otra ronda de semillas.
Recoger calabazas demasiado pronto
Respuesta: Las calabazas pueden recolectarse cuando hayan adquirido un color naranja intenso y uniforme y la corteza esté dura. Las calabazas maduras también pueden dejarse en el huerto/campo hasta que las cepas mueran por una helada ligera o una helada.
Al cosechar las calabazas, manipúlalas con cuidado para evitar cortes y magulladuras. Córtalas con un cuchillo afilado o unas tijeras de podar. Deja varios centímetros de tallo unidos a cada fruto. Una calabaza con un tallo o un mango de 3 a 5 pulgadas es más atractiva. Además, las calabazas con tallo tienen menos probabilidades de pudrirse. No transporte las calabazas por el tallo. Los tallos pueden no soportar el peso de las calabazas y romperse.
Tras el curado, almacene las calabazas en un lugar fresco y seco. La temperatura de almacenamiento debe ser de 50 a 55°F. Cuando almacene las calabazas, colóquelas en una sola capa donde no se toquen unas con otras. Una buena circulación de aire ayuda a evitar que se forme humedad en la superficie de la fruta y retrasa la proliferación de hongos y bacterias. Colocar las calabazas en montones genera un calor no deseado que puede provocar la putrefacción de algunos frutos. Retire y deseche rápidamente las calabazas que muestren signos de podredumbre.
Fases de maduración de la calabaza
En el caso de las calabazas de invierno, el momento de la cosecha depende de la variedad. Sin embargo, en general se puede afirmar que la cosecha de calabazas comienza entre finales de agosto y finales de octubre. Con unos pequeños trucos puede averiguar rápidamente cuándo se puede cosechar su calabaza.
Cuando termina la fase de crecimiento de las calabazas, los tallos se vuelven secos y leñosos. Si el tallo es muy leñoso, la calabaza puede cosecharse sin dudarlo. Otra característica que indica la madurez de la calabaza es el color intenso que tiene cuando está completamente madura. Y otro signo de madurez de la calabaza de invierno es un sonido hueco cuando se le da un golpecito. Sin embargo, en cuanto una primera helada se abate sobre esta deliciosa hortaliza, ya no se debe cosechar. Por lo tanto, ¡no coseche demasiado tarde!
Durante la propia cosecha, asegúrese de que las calabazas no sufran daños. Si las calabazas se aplastan o se dañan de alguna otra forma, puede comenzar un proceso de putrefacción, por lo que el disfrute de la calabaza cultivada en casa no durará mucho. Tras la cosecha, hay que lavar bien las calabazas para que no se multipliquen bacterias ni hongos en los restos de tierra. A continuación, se guarda la calabaza en un lugar seco. Quienes observen todos estos consejos pueden esperar una cosecha de calabazas satisfactoria.
Cuándo cosechar las mini calabazas
Cultivar calabazas es divertido para toda la familia. Cuando llegue el momento de cosechar el fruto, presta especial atención al estado de las calabazas para asegurarte de que es el momento adecuado. Cosechar las calabazas en el momento adecuado aumenta el tiempo de almacenamiento. Conozcamos más sobre el almacenamiento de las calabazas una vez recolectadas.
Las calabazas duran más si las cosechas cuando alcanzan su color maduro y la corteza está dura. Utiliza el paquete de semillas para hacerte una idea del color maduro de la variedad. Espera a que la corteza de la calabaza pierda su brillo y esté lo suficientemente dura como para que no puedas arañarla con la uña. Los zarcillos rizados de la parte de la enredadera cercana a la calabaza se vuelven marrones y mueren cuando está completamente madura, aunque en algunos casos pueden seguir madurando fuera de la enredadera. Corta el tallo con un cuchillo afilado, dejando 7,5-10 cm de tallo unido a la calabaza.
Recoge todas las calabazas antes de la primera helada. También puedes cosechar el fruto y curarlo en el interior si el mal tiempo hace probable que la cosecha se pudra en la vid. Las heladas tempranas y el tiempo frío y lluvioso exigen una cosecha temprana. Si tienes que cosecharlas antes de lo que te gustaría, cúralas durante diez días en una zona con temperaturas entre 80 y 85 grados F. (27-29 C.). Si tienes demasiadas calabazas para curarlas en el interior, prueba a colocar paja debajo de ellas para que no entren en contacto con la tierra húmeda. Haz una prueba de rascado con la uña para decidir cuándo están listas para su almacenamiento.