Trampa para avispas con cerveza

Trampa de cristal para avispas

En primer lugar, se trata de un método estándar utilizado por los apicultores para mantener a las avispas alejadas de sus colmenas; también es una metodología estándar utilizada por científicos de todo el mundo para muestrear avispas. Las trampas de cerveza son el principal método de seguimiento de la expansión del avispón asiático en Francia; son el medio por el que los registradores de avispas establecidos han podido generar datos sobre la abundancia de avispas durante varias décadas; de forma más comercial, se comercializan para su uso en espacios abiertos públicos y parques de ocio de todo el mundo. En resumen, ¡no hemos inventado nada nuevo! La gente utiliza trampas de cerveza para matar avispas en todo el mundo, todos los días.

En segundo lugar, para obtener datos significativos sobre las especies que hay y su número necesitamos identificar las avispas que se capturan y estar seguros de que lo hemos hecho correctamente. Para ello, necesitamos ver las avispas y examinarlas detenidamente. Es imposible identificar una especie de avispa en vuelo o a partir de una foto. Podríamos contar las avispas que se acercan a un cebo (¡como un bocadillo de mermelada!), pero sería muy difícil identificarlas al vuelo y probablemente nos equivocaríamos al contarlas (un individuo podría visitarnos varias veces, por ejemplo). Además, el ciudadano científico tendría que acercarse a las avispas vivas, lo que le expondría a un riesgo minúsculo pero real de sufrir una picadura. Por último, sería difícil garantizar que todo el mundo hiciera el mismo esfuerzo o tuviera la misma capacidad para identificar a los insectos. Desde el punto de vista científico, los datos que obtendríamos carecerían prácticamente de valor.

Cómo atrapar avispas pero no abejas

La trampa le ayudará a protegerse contra varios tipos de insectos molestos en jardines, viñedos, balcones, cenadores y otros lugares donde zumban «huéspedes no invitados». No se utilizan productos químicos para atrapar insectos.

Aplicación. Desenrosque la tapa blanca y vierta el cebo dentro de la trampa: sirope de fruta, zumo u otra bebida (preferiblemente fermentada). Enrosque la tapa y cuelgue la trampa terminada sobre el lugar que desee proteger de los insectos. El color de la botella y el olor del cebo atraerán a los insectos, que volarán hasta la trampa y caerán en el líquido. Gracias a su diseño especial, los insectos no podrán salir volando. No apto para uso en interiores y control de mosquitos.

Moscas de la fruta: 125 ml de vinagre de sidra de manzana, 50 ml de vino tinto y 16 cucharadas de azúcar o 100 ml de cerveza. Si desea aumentar la eficacia de la trampa, cambie el cebo cada 15-20 días, dependiendo de la temperatura y del número de insectos. Así preparada la trampa no atraerá a los polinizadores – abejas y abejorros.

¿Funcionan las trampas caseras para avispas?

Las avispas se sienten atraídas por la cerveza, ya que se alimentan de azúcar. Al igual que les atrae la fruta podrida, el azúcar fermentado no las repele, pero puede intoxicarlas. Es más probable que busquen fuentes de azúcar como la cerveza a finales de otoño, cuando las fuentes de alimento escasean cada vez más.

En la naturaleza, a las avispas les encanta la fruta podrida. Es posible que haya visto avispas arrastrándose sobre manzanas podridas en su jardín. Esta fruta podrida empieza a fermentar, por lo que las avispas se sienten atraídas por la cerveza de forma similar a como se sienten atraídas por la fruta podrida. Las avispas se sienten atraídas principalmente por el azúcar que contienen la cerveza y la fruta, y lo percibirán y se sentirán atraídas por él. Por esta razón, la sidra también atrae a las avispas.

La fermentación es el proceso que convierte el azúcar en alcohol, por lo que lo que buscan las avispas es el azúcar, no la cerveza o el alcohol en sí. Los zumos de frutas, como el zumo de naranja, pueden atraer a las avispas más que la cerveza, y las bebidas alcohólicas más fuertes con menos azúcar no serán atractivas para las avispas.

Las avispas se intoxican cuando consumen cerveza, que es una de las razones por las que la cerveza se utiliza a menudo como trampa para avispas. Las avispas atraídas por la cerveza entrarán en una lata o botella, se intoxicarán y luego serán incapaces de volver a salir. Una forma común de hacer una trampa para avispas es cortar la parte superior de una botella e invertirla.

¿Por qué no funciona la trampa para avispas?

Pero una picadura de avispa sí. Nada estropea más una barbacoa en el jardín que el zumbido incesante de una avispa decidida a hacer de tu comida su próximo festín. A finales de verano es cuando las avispas son más agresivas, pero en lugar de ir a la ferretería a por soluciones costosas o químicas, ¿por qué no hacer tu propia trampa?

En esta época del año, Jocelyn Crocker, catedrática de Física del NAIT, suele colocar en su jardín un puñado de trampas caseras para avispas. Las trampas no sólo permiten cenar al aire libre tranquilamente, sino que protegen a las 120.000 abejas melíferas que viven en su jardín.

Hacer trampas para avispas es tan sencillo como reutilizar y modificar botellas de refresco o jarras de leche vacías (como se muestra en el vídeo de arriba). Sólo tienes que añadir restos de fruta, cerveza o refrescos como cebo (también puedes usar restos de carne), junto con unas gotas de jabón para platos. El jabón reduce la tensión superficial del líquido, lo que garantiza que las avispas se hundan y se ahoguen en lugar de salir volando para zumbar otro día.

Las trampas son tan sencillas de hacer que incluso pueden fabricarse in situ, como en un camping. Crocker afirma que no suponen ningún riesgo para polinizadores como las abejas de la miel, los abejorros o las abejas de los huertos, a las que sólo les interesa el polen y las flores. Dada la cantidad de atención que recibirán las trampas por parte de las avispas, quizá no sea conveniente colocarlas junto a la barbacoa, sino en un rincón del jardín.